Día uno.

　　Verte nuevamente fue una de las cosas más.... Odiosas y desafortunadas que he vivido a mis cortos casi dieciséis años. Era la hora del descanso y yo estaba bajo un gran árbol leyendo por tercera vez mi libro favorito cuando tú apareciste. Debo admitir que en estos dos años sin verte has cambiado mucho, de hecho, no te reconocí al instante, lo hice cuando me gritaste "¡Hey! Tú, enana" y corriste a arrebatarme el libro de las manos para después tirarlo a la fuente de la escuela.

　　Con mucho odio, la alta y no enana Hayley.

　　Día dos.

　　El día de hoy estoy muy contenta, apareció otro libro como el que tú tiraste a la fuente en mi casillero, mi mejor amiga Sally tiene la loca idea de que tú lo colocaste ahí, pero yo estoy segura de que jamás en tu vida harías eso ¿Cierto?; es decir, me odias y yo te odio, siempre ha sido así y no creo que sea el momento para cambiarlo.

　　Con mucho odio, una contenta Hayley.

　　Día tres.

　　Si pudiera describirte con una palabra la respuesta seria vanidoso, he notado como te has visto toda la clase de historia en el espejo. Sally y yo estábamos detrás de ti cuando lo hacías y si quieres mi opinión eres horrible, no necesitas verte en un espejo para comprobarlo.

　　Con mucho odio, Hayley la más honesta mentirosa

　　Día cuatro.

　　Esta tarde estabas en el centro comercial, tenías un periódico en las manos y observabas a Tomy Sanders mientras el compraba algo en una tienda, ¿Cómo sé que lo observabas? Tu periódico estaba al revés.

　　Con mucho odio, una Hayley confundida

　　Día cinco.

　　Me entere de algo muy importante, a Sally le gusta alguien. Te lo digo porque ese alguien eres tú y aunque sé que jamás te entregaré esta carta ni ninguna otra puedo asegurar por escrito que si le haces daño no tendré compasión a la hora de vengarme. Sé que no eres el mejor tipo, pero tampoco quiero comprobar mis sospechas de que eres el peor.

　　Con mucho odio, una amenazante Hayley

　　Día seis.

　　No se cómo te has enterado, pero hoy me has hecho enfadar mucho, te has puesto delante de la clase y has gritado que duermo con un mameluco de ositos, a veces creo que eres una clase de ninja o espía encubierto o simplemente un chico chismoso con complejo de adivino. Cabe aclarar que no es un mameluco y en el remoto caso de que lo fuera ¡¿A ti que te importa?!

　　Con mucho odio, una Hayley que no usa mamelucos de ositos.

　　Día siete.

　　Sally llora y llora mucho, me dan unas ganas inmensas de estrangularte ¿Cómo se te ha ocurrido rechazarla, y de esa manera tan cruel? ¿Acaso estás loco? ¡Claro que lo estas!

　　Mientras yo la consuelo debajo del mismo árbol donde me quitaste mi libro, tú solo observas de lejos conversando con tu mejor amigo Dan, puedo ver como ríes ante mis miradas de odio y te carcajeas cuando te muestro mi dedo favorito. ¡Eres tan despreciable!

　　Con más odio que ayer, una MOLESTA Hayley.

　　Día ocho.

　　No me sorprendió que hoy en la mañana,

justo el día de mi cumpleaños

me gritaras "¡Hey! Tú, enana", tampoco me sorprendió que me arrojaras una cubeta con agua helada y mucho menos que te rieras como maniático de mí, pero lo que realmente me dejo anonadada fue que me felicitaras y me entregaras un nuevo cambio de ropa, que quede claro que si lo use fue porque la ropa que llevaba quedó arruinada y aunque me cueste admito que debí agradecerte por el regalo, era lindo, pero solo te mire mal y me fui a clases, de igual manera el tuyo no fue el único regalo que recibí

Si a eso se le puede llamar así

Sally me regalo un collar muy lindo con una inscripción de mejores amigas, Ely otra de mis amigas me dio unos zapatos e incluso tu amigo Dan me regalo un bolso y Tomy un perfume, esos dos últimos no me los esperaba.

　　Con mucho odio, una confundida, molesta y agradecida Hayley.

　　Día nueve.

　　No sé cómo explicarte esto, parece que no escuchas cuando trato de aclararte que en realidad solo estaba tratando de consolar a Sally con Ely, le decíamos que no era tonta por enamorarse de ti, entonces Ely dijo que eras lindo y yo asentí, pero entiende que yo no creo que seas lindo, solo trataba de consolar a Sally y en todo caso hubieras molestado a Ely ya que ella fue la que lo dijo no yo. Y ¡Deja de reír y sonreír como tonto!

　　Con odio, una avergonzada Hayley.

　　Día diez.

　　“Las rosas son rojas y los girasoles amarillos, me gustaría lanzar a tu rostro un par de grandes ladrillos”.

　　No entiendo como no te gusto el poema que te compuse cuando nos pusieron en equipos para el trabajo de literatura, y lo que menos entiendo es como no quisiste leerme el tuyo. Seguro ni lo hiciste por estar lanzándome bolitas de papel, aún tengo algunas en el cabello.

　　Con odio, una poeta Hayley.

　　Día once.

　　Tal vez debería hacer caso a lo que Sally recomienda y dejar de escribir esto. Es una pérdida de tiempo, ni siquiera te las voy o quiero entregar, pero por alguna razón ya se me ha hecho costumbre.

　　Con odio, una dudosa Hayley.

　　Día doce.

　　¡Te vi loco maniático!, estabas corriendo por mi jardín a las dos de la madrugada, yo estaba despierta leyendo un nuevo libro cuando escuche un ruido, entonces note que eras tú y no se me ocurrió nada mejor que perseguirte mientras te reías y gritabas que regresara a casa, hice eso solo cuando me di cuenta de que no traía pantalones.

　　Con odio, una Hayley más avergonzada que nunca.

　　Día trece.

　　No puedo creer que hice algo tan malo como para merecer esto ¡Eres mi nuevo vecino!, al menos eso explica lo de ayer. No tienes idea de la sorpresa que me lleve cuando toque la puerta y abriste tú, que quede claro que yo horneé las galletas y no las compre como supusiste. Por cierto, tu mama es muy dulce, ahora entiendo la frase "A la gente buena le pasan cosas malas", en este caso lo malo eres tú.

　　Con odio, una Hayley Chef.

　　Día catorce.

　　¿Por qué te ofreciste hoy a llevarme a la escuela? ¿Acaso planeabas asesinarme en el auto y luego tirarme a un barranco a que me comieran las pirañas? ¿Querías que en el periódico anunciaran: encuentran cuerpo de un cadáver que murió perteneciente a una chica de dieciséis años llamada Hayley Blair? ¿Estas consiente que ahora escribo incongruencias? Ay Dios, necesito calmarme. Lo bueno es que llegue sana y salva a la escuela.

　　Con odio, una aliviada Hayley.

　　Día quince.

　　Sally piensa que gustas de ella porque la miras todo el tiempo, yo estoy con ella y lo noto, entonces ¿Por qué la rechazaste?

　　Con odio, una confundida Hayley.

　　Día dieciséis.

　　Hoy en la noche no escuche tu música, ni vi tus luces encendidas. Creo que es la primera vez que no das una señal de vida desde que te mudaste hace tres días. Es extraño saber que a pesar de que las ventanas de nuestras habitaciones están conectas no he sabido nada de ti.

　　Con odio, una preocupada Hayley.

　　Día diecisiete.

　　Hoy te vi en la escuela. Estábamos en clase de artes, la maestra pidió que dibujáramos algo y tú me dibujaste a mí. Diría que me gusto el dibujo si no me hubieras puesto bigotes y un diente delantero negro, además te burlaste de mi gatito y dijiste que parecía una cabra.

　　Con odio, una Hayley dibujante de Gatitos y no cabras.

　　Día dieciocho.

　　Estoy muy pero muy nerviosa, tal vez esa sea la razón por lo que escribo esto. Hoy Tomy me ha invitado a salir, tú estabas cerca cuando lo hizo y entonces te acercaste más y dijiste "Enserió invitaras a la enana a salir, wow amigo sí que estas desesperado" luego golpeaste su hombro y entraste a la cafetería, no sé por qué me dolió que digieras eso pero solo te ignore y acepté la propuesta del chico. Ely dice que no haga mucho caso a lo que dices porque ya sabemos que te apasiona molestarme y Sally, la que se supone y es mi mejor amiga solo comento algo como "Vamos Haly, eres una rubia hueca ¿Qué esperabas? ¡Claro que la gente se sorprende de que te inviten a salir!" Yo solo me sentí peor, odio ese estereotipo y todos los demás.

　　Con odio, una triste Hayley.

　　Día diecinueve.

　　Hoy tenía mi cita con Tomy, por lo que Sally y Eli fueron a mi casa temprano y me ayudaron a arreglarme, pero justo cuando ellas terminaron y se fueron tú llegaste con una pizza y películas. Estaba muy confundida, entonces dijiste que mi madre te pidió que te quedaras conmigo esa tarde porque ella tenía que salir, yo maldije internamente por olvidar avisarle sobre mi cita y tuve que cancelar con Tomy y pasar el resto de la tarde contigo así que me puse mi pijama y acepte ver las películas que trajiste, eran de comedia. Me gusta tu sonrisa, ¡Oh, Dios! creo que me estoy volviendo loca, seguro es por el fijador y maquillaje que me pusieron Eli y Sally para mi "cita".

　　Con odio, una psicópata Hayley.

　　Día veinte.

　　A pesar de que ayer pasamos una linda tarde viendo películas hoy todo volvió a la normalidad, Tal vez el hecho de que me hayas arrojado encima una cubeta de pintura azul me ha ayudado a saberlo o simplemente que te hayas burlado de mi por lo mismo diciéndome pitufina, tal vez el golpe que te di te ayude a ti a saberlo.

　　Con odio, una colorida Hayley.