Capítulo 1

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Punto de vista de Keith Leonard

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"¡Basta, hombre!" Dice Bruce, riendo como un estúpido y burlándose de mí. "Deja de ser un marica... Esa chica te ama y estaría encantada de ser tu compañera cuando se entere de lo que eres". y pasa a mi lado y agarra la cajita de terciopelo que coloqué sobre mi escritorio.

“Y ni siquiera ella lo será, con esto” y abre la caja de terciopelo, revelando el anillo que compré, “¡Con esto, cualquier mujer en su mente diría que sí!” y empieza a reír.

"Yo también diría que sí, ¿sabes?" Joey, mi futura gamma me dice "Pero no soy tu compañero, así que... solo soy un tipo pobre, estoy perdiendo aquí".

Los miro con incredulidad. ¿Son esos dos estúpidos realmente mis futuros camaradas en esta vida? ¿Mis futuras beta y gamma? Hemos sido amigos desde… desde siempre en realidad. Ellos me conocen y saben lo importante que es esto para mí, entonces ¿por qué diablos se burlan de mí en un momento tan importante?

"¿Sabes que?" Digo y tomo el anillo de las manos de Bruce.

"Sabes que esto no es tan simple como parece, así que dame espacio, ¿quieres?" y empiezo a caminar afuera de mi empacadora.

Es mi empacadora porque soy Keith Leonard, futuro Alfa de Spirit Walker Pack. Tengo diecinueve años y hace un año encontré a mi pareja. Hemos estado enamorados desde entonces y ella es la encarnación de la perfección. Ella es lo mejor que encontré en esta vida y no tengo idea del bien que hice al recibirla como mi compañera.

Somos compañeros de clase. Sí, lo escuchaste bien. Compañeros de clase. Ella no es uno de los miembros de mi manada y ella… ella ni siquiera es un hombre lobo. Siempre la encontré atractiva e interesante, con su espíritu solitario y su timidez. Ella es diferente de todos los humanos que conozco y al principio pensé que estar cerca de ella era pura atracción, hasta que cumplí dieciocho años y todo lo que pude escuchar fue a Harris, mi lobo, gritando fuerte que ella es nuestra compañera.

Debería haberlo sabido. Desde la primera vez que la vi, en el primer año, no podía quitarle los ojos de encima.

Era condenadamente difícil acercarse a ella, porque siempre estaba asustada y alerta. Como un cordero listo para ser sacrificado. Pero lo hice, y aquí estoy hoy en su decimonoveno cumpleaños, lista para revelar mi verdadera naturaleza y pedirle que sea mi compañera.

Imaginé este momento durante todo el año. La preparé para esto, la traje aquí, en mi manada, conocí a mis padres, para que no se sorprenda y recuerde que no somos animales sino humanos también. Tenía muchas ganas de que ella me viera tal como soy, en mi hábito natural. Cuando ella estuvo aquí, a ninguno de los miembros de mi manada se le permitió transformarse. Ella necesita saber que soy un hombre lobo, pero le contaré todo a mi manera, la guiaré en cada paso en este mundo irreal.

Fue un largo camino para llegar hasta aquí pero valió la pena. Al final del día lo único que puedo esperar es tenerla en mis brazos como mi compañera y prometida.

"¿Entonces?" Bruce pregunta corriendo detrás de mí y saltando a mi auto porque solo quiero arrancar el motor, ¡pero es tan jodidamente molesto! ¿Por qué sigue deteniéndome y haciéndome preguntas? Se ha estado burlando de mí desde que traje el anillo.

“¿Me darías espacio, hombre?” y le doy un gruñido.

"No." Y se pone cómodo y justo cuando quiero arrancar, se abre la puerta trasera de mi Lamborghini y salta Joey.

"¡Yo también quiero verlo!" él dice.

"¡Salir!" Les gruño, pero estos sinvergüenzas me ignoran.

"No. Quiero ver el momento en que Joanna se desmayará al oír que eres un hombre lobo”. Bruce se burla de mí otra vez y me doy cuenta de que estoy perdiendo el tiempo con estos dos idiotas.

"Simplemente no aparezcas y arruines mi momento, ¿verdad?" -digo y estoy pisando el acelerador a fondo.

“¡A la escuela secundaria Anacortes!” Joey grita desde el asiento trasero, pero esta vez lo ignoro para siempre y puede que sienta eso porque se calma y dice.

"Sé que es el último día de la escuela secundaria, hombre, y que no puedes arruinar esta oportunidad", ¿De qué diablos está hablando?

“Pero por si acaso, si ella dice que no, o muere de pánico al ver tus garras, todavía nos tienes” y con eso Harris los vincula mentalmente y usando su comando Alfa dice:

"¡Sólo cállate!"

Nada saldrá mal.

Estaciono mi auto y cuando salgo de él olfateo el aire tratando de encontrar a mi pareja. Conozco cada uno de sus movimientos. Ni siquiera necesito verla y ya sé dónde encontrarla.

En el césped de la escuela hay un viejo roble. Todos los días, me detengo y la miro mientras está sentada leyendo sus libros. Ella es tan delicada y es un ángel viviente.

Hoy hace un poco de viento. Es verano pero en este lugar del país es normal que llueva con frecuencia. Se apoya en ese árbol y cerrando los ojos inhala el aire. Sé que sólo yo puedo sentir su aroma a vainilla, pero quiero imaginar que ella también sintió mi presencia.

Su cabello castaño y medio rizado le cae sobre la cara, haciéndola girar un poco la cara y verla así me hace sentir aún más enamorado de ella.

"¡Hazlo, hombre!" dice Harris. “Hemos jugado demasiado a este juego, la necesito como mi compañera. Este juego de novias debe terminar. La quiero conmigo todo el tiempo”.

Harris tiene razón. Con solo verla mi corazón empezó a latir tan fuerte que creí que iba a explotar. Necesito terminar esto hoy.

"¡Tenemos los dedos cruzados, hombre!" Tanto Bruce como Joey me vinculan mentalmente”. ¡Tráenos una Luna honorable hoy!

“¡Váyanse, estúpidos!” Les gruño y cierro todos los enlaces intermedios con ellos mientras empiezo a caminar hacia Joanna.

¡No puedo respirar! ¿Qué diablos está pasando conmigo? Tengo miedo por primera vez en mi vida.

Por favor Diosa, nunca pedí nada. Siempre he hecho lo correcto. Por favor, haz que me acepte... por favor...

Tengo tantas cosas en mente ahora mismo. ¿Qué pasa si Bruce y Joey tienen razón? ¿Qué pasa si ella dice que no?

De repente abre los ojos como si me sintiera y quedo hipnotizado por su belleza. Lleva un par de jeans ajustados negros y una camisa larga con cuello alto. Además, ella está usando maquillaje, y eso es extraño porque lo odia, pero cuando me mira con sus hermosos ojos azules ya nada importa.

"¡Te extrañé!" Le digo y tomo su mano. La saco del suelo directamente a mis brazos y la beso.

“Bueno”, susurra e intenta girar la cara y mirar en otra dirección. "¿Podemos hablar?"

¿Hablar? ¿Negociaciones? ¿Está bromeando? Espera… ¿está evitando mi mirada?

“Hombre…” susurra Harris. “Ella no dijo que ella también nos extrañaba”

La miro fijamente. Harris tiene razón. Por lo general, ella decía "Te extrañé más", pero esta vez no.

Agarro su barbilla y hago que me mire directamente a los ojos, porque no sé qué está pasando pero hoy regresaré a casa con ella como mi Luna.

"¿Qué está pasando, nena?" Le pregunto, sin dejarle la oportunidad de arruinar mis planes.

Ella mira a su alrededor como si estuviera buscando algo, o alguien y su mirada de repente se asusta, haciéndome mirar en la misma dirección también, pero no puedo ver nada extraño.

“¡Juana!” La llamo por su nombre y agarro su barbilla. Hago que ella me mire de nuevo. ¿Qué diablos está pasando?

"¿Podemos ir a algún lugar más privado, por favor?" pregunta en un susurro, como si apenas pudiera hablar. Como si estuviera sufriendo. Siento su estrés, pero ella es humana y no puedo vincularme con ella hasta que la marque.

"¡Vamos!" Digo y tomo su mano en la mía. No la dejaré ir. Bruce y Joey me miran fijamente cuando paso cerca de ellos, pero los ignoro y camino con ella directamente hacia el bosque detrás de nuestra escuela.

"¡Déjame ir, Keith!" dice, tratando de soltar su mano de mi agarre, pero la mantengo atada a mí hasta que estemos lo suficientemente lejos de la escuela.

"¿Qué demonios te pasa?" pregunta, mirando a su alrededor.

"Querías hablar", le digo. “Estoy escuchando” y mi corazón está como una pequeña pulga en este momento.

Puse mis manos en los bolsillos de mis jeans y sentí la caja de terciopelo en uno de ellos.

"Pensé en nosotros", comienza Joanna, pero evita mi mirada.

"¡Mírame Joanna!" Casi le gruñí, haciéndola sobresaltarse y finalmente me miró a los ojos.

“Creo”, dice y mira al suelo. "Que deberíamos evitarnos unos a otros de ahora en adelante".

Y mi corazón se detuvo allí mismo. “Se acabó la escuela y comenzaremos nuevas vidas como estudiantes, en diferentes lugares y pensando en todo lo que tuvimos en el último año me di cuenta de que ya no quiero esto”.

Sus manos tiemblan en las mías y al sentirla actuar así finalmente la dejé ir.

“¿Te acabas de dar cuenta de eso? ¿Después de un jodido año entero? Le pregunto, apretando los dientes.

"Sí... me acabo de dar cuenta de que ya no quiero estar contigo". ella susurra.

"¡Mírame, Juana!" Le ordené y ella se estremeció al escuchar mi orden alfa incluso si es humana. "¡Al menos mírame cuando estés contando toda esta mierda delante de mí!"

Ella levanta los ojos y están llorosos.

"¡Mierda, hombre!" Le digo a Harris. "Algo está mal en ella" y sin pensarlo dos veces la atraigo hacia mi pecho, abrazándola fuerte, pero ella gime de dolor.

"¿Qué carajo?" Pregunto y la miro. “¿Estás herida, Joanna?”

“No”, dice y me empuja, dando un paso atrás y tirando de sus mangas como si estuviera tratando de ocultar algo.

"Necesito irme", simplemente me dice y comienza a alejarse de mí. ¿Ella me deja? ¿Está bromeando?

"¡Ella es nuestra compañera!" dice Harris. “Ella no puede dejarnos así sin más. ¡Estábamos hechos para ser!"

Por supuesto que lo estábamos, pero ella no tenía idea de eso.

Ella realmente nos está dejando.

Y de la nada le grito y le gruño:

"¡Detente ahí o te romperé los pies, Joanna Shelton!" y comenzando a caminar en su dirección le pregunto:

"¿Por qué?" y eso la hizo detenerse. "Dime por qué. ¿Fue algo real o yo era el único que te amaba?

Su espalda está frente a mí.

“¿Quieres una respuesta sincera?” y ella se da vuelta, con una mirada extraña.

"¡Hablar!" Le ordeno de nuevo y siento cómo cada emoción que tenía por ella me abandona. Me siento rechazada, incluso si todavía somos compañeros y ella no sabe lo que está haciendo.

"Acabo de usarte", dice Joanna así sin más. “Por popularidad” y ella se da vuelta y continúa alejándose de mí.

¿Eso es todo?

Me estoy golpeando el pecho porque duele muchísimo. Soy un jodido alfa y, sin embargo, rompí a llorar. Estoy llorando como un bebé.

La veo irse y caigo de rodillas tan pronto como la pierde de vista. Escucho a Bruce y Joey, corriendo en mi dirección y al verme, preguntaron.

“¿Dónde está nuestra Luna?”

¿Cómo decirles…?

“¡Keith!” Bruce me llama y lo miro y rompo a llorar.

"Hombre, me estás asustando muchísimo". Joey dice esta vez. “Cuéntanos qué pasó”.

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“¡Mi compañero me dejó!”