El sonido de la campana retumbaba sobre la capital de Normandía anunciando el matrimonio de la bella Marie, hija de un vikingo jefe de un clan experimentado, era admirado por sus grandes travesías y luchas y Felix hijo de un duque francés instaurado en este lugar a la llegada de la soberanía de su reino, un matrimonio esperado por mucho tiempo especialmente por aquellos que esperaban un cambio, esta unión representaba el surgimiento de una era fuerte.

　　—Que viva la feliz pareja – se escuchaba alrededor mientras esta salía por la puerta principal de la catedral

　　Ninguno de los dos podía ocultar la alegría en sus rostros; era algo que esperaban hacía mucho tiempo ,más exactamente 4 años cuando por primera vez se conocieron, Marie estaba pescando a las orillas del rio cuando el joven de 16 años la sorprendió, un cuchillo se posiciono en la garganta de este sin que el pudiera siquiera reaccionar, tumbado en el piso abrió los ojos para encontrarse con unos de color verde esmeralda que lo miraban sin titubear, eran los ojos de una niña que estaba dispuesta a matarlo, un silencio profundo los rodeaba hasta que la pequeña hablo.

　　—¿Quién eres y que quieres?

　　—Yo …. – el titubeo para dar su respuesta –

　　—HABLA O TE ABRO COMO A UN PESCADO

　　—Bueno …. Um , yo soy –

　　El entendía las estupideces que salían de su boca, pero era difícil responder, era obvio que estaba nervioso y no sabía cómo reaccionaria esta chica salvaje ante sus palabras.

　　—Tu futuro esposo – la niña se levantó y guardo su cuchillo—

　　—Mentiroso, yo nunca me voy a casar, viajare por el mundo con mi padre y traeré grandes tesoros

　　—Pero algún día tendrás que casarte y ese día será conmigo, ya veras

　　La niña giro su rostro bruscamente con rabia hacia el chico, se trataba de un extranjero al que nunca había visto antes. Unos ojos azules que reflejaban el océano inmenso y su cabello negro que le hacía recordar la obsidiana, su mirada se suavizo un poco.

　　—Está bien, eres lindo así que te daré una oportunidad – una sonrisa dulce se ha pintado en la cara de la niña – veremos si logras cautivar mi corazón

　　Mas que nada la que había logrado cautivar al joven fue esta pequeña niña, el chico que nunca había sentido tales emociones, una mezcla de miedo con ganas de acercarse más a ella, el chico se puso de pie y con un paso firme pronuncio las palabras que definirían todo su futuro.

　　—Para mis 21 años serás mi esposa

　　El tiempo paso, ellos pasaban todos los días en el rio hablando y jugando, ella conoció la cultura conservadora de Felix mientras el descubrió nuevos horizontes llenos de fantasía, cosas que para el eran solo historias de hadas y una vida diferente llena de libertad y compromiso, luego de algunos años y ya ligada a su adolescencia el fuerte corazón de la pequeña vikinga cayó ante el encanto del atento muchacho, y como si por obra del destino se tratara, para los 17 años de la chica su compromiso había sido decidido, se discutió su ceremonia ya que esta tenía que realizarse en una iglesia según la tradición cristiana; cosa que disgustaba a su familia, pero por el amor profundo que su padre y hermanos tenían hacia ella no la detuvieron y en su lugar al terminar esa boda, celebrarían su propia ceremonia según su propia tradición ante los ojos de los dioses nórdicos, por este motivo la boda se celebró en principios de otoño el día viernes día dedicado a la diosa frigga.

　　—Partiremos a tu casa y nos prepararemos para nuestra unión —Marie ha sonreído ante la dulzura de las palabras de su amable esposo –

　　—¿tus padres no irán, ¿verdad?

　　—No, para ellos esta celebración es pagana y no está bien ante los ojos de Dios

　　—Lo lamento Felix

　　—No importa, tú eres más importante – un beso se ha posado sobre su frente, antes de subir al carruaje y marcharse –

　　Al llegar a el hogar de Marie; los dos fueron separados inmediatamente, la chica fue tomada por sus amigas para tomar un baño, después de este su cuerpo fue enjuagado con agua helada por el dulce olor de las flores y plantas. Después de esto fue dirigida junto a un roble en la mitad del bosque lugar sagrado para las ceremonias.

　　Se realizaron los sacrificios correspondientes para invocar a los dioses, finalmente llego la hora esperada su esposo saco una espada con un mango de plata con incrustaciones de oro la cual entregaría a su esposa.

　　—Esta espada perteneció a mi abuelo, es símbolo de fuerza en mi familia, hoy la entrego a ti Marie Eiricks y te reconozco como la futura madre de mis hijos, mi amada compañera por el resto de nuestra existencia

　　Marie ha sonreído y su hermano mayor le ha entregado una espada de hierro forjado su mango por madera roble y recubierto por cuero, decorado con piel y unas cuencas que colgaban de el.

　　—Esta es la nueva espada que simbolizara nuestro futuro, a través de ella seremos protegidos por los dioses y escribiremos nuestro futuro y nuestras propias tradiciones

　　Cada uno ha tomado espadas y seguido de esto han intercambiado sus anillos que se encontraban en un anillo mayor de runas y piedras a través del cual firmaban su juramento ante el martillo de Thor

　　Al finalizar la alegría de la pareja no podía ser más, acababan de tener dos bodas en un solo día y no sentían ni un rastro de cansancio, el banquete seria celebrado en su nuevo hogar donde el novio ha entrado cargando en brazos a su esposa, en este lugar las dos familias los esperaban, era el lugar donde ambas culturas se podía relacionar.

　　El banquete funciono perfectamente, luego de que el padre de la novia lo inaugurara la celebración se desenvolvió como si siempre hubieran convivido ambas naciones, sus dos familias hablaban como si fuera algo normal.

　　De repente el tañido de los cascabeles pertenecientes a los guardias del ducado invadió por completo la celebración, una rebelión del hermano de Felix que nunca nadie espero. Los primeros en caer fueron los guardias del duque quienes como pudieron avisaron a su amo, pero este sin poder hacer mucho trato de combatir pero cayó ante la tiranía de su propio hijo, la pareja de duques habían muerto y esto simbolizaba el comienzo de la caída, el sonido del cuerno de alarma era un eco en medio de la desesperación de los invitados que eran masacrados a sangre fría, el padre de Marie defendió a su gente y a su amada hija junto a sus hijos lo más que pudieron pero cayeron atravesados por espadas de aquellos vasallos que no mostraban misericordia.

　　—¿Hermano que estás haciendo? Has enloquecido, mataste a nuestra familia

　　—Felix o pobre y dulce Felix ¿acaso crees que me importa?, nuestros padres solo te han mimado a ti y se han olvidado de su primer hijo y … — él se ha acercado a Marie y ha rozado su rostro con la yema de sus dedos – porque la puedes tener a ella , por que tú, que no la harás feliz

　　Marie que no tenía oportunidad de defenderse a dado un paso atrás mientras sus ojos buscaban algo con lo cual pudiera defenderse, pero era inútil no había más que cucharas y comida sobre la mesa.

　　—No la vuelvas a tocar – Felix enojado y con sus ojos llenos de agua no podía soportarlo el hermano que amaba y admiraba lo había traicionado – ha tomado el martillo que se encontraba junto a él, el cual había portado en toda la ceremonia y trato de abanicarlo; sin embargo, él no era capaz de usarlo apropiadamente y no le costó mucho a su hermano someterlo –

　　—Suéltalo – Marie no podía con tanto, pero aprovecho la distracción y tomo las espadas que usaron en su matrimonio

　　—Marie dime una cosa ¿por qué él? Acaso que tiene el que lo haga mejor que yo – era claro cuál fue su principal motivo para enloquecer de esa manera – Yo también te amo, también estuve contigo siempre sin embargo lo escogiste a él, pero el …

　　Marie solo permaneció en silencio era cierto que habían compartido muchos momentos pero su amor solo pertenecía a Felix , de sus ojos empezaron a brotar lagrimas tal vez el estallido de los recuerdos o el hedor a sangre irritaban sus ojos pero era imposible parar su llanto.

　　—Por Odin que no te perdonare lo que has hecho Ethan y lo pagaras

　　—Y quien me lo cobrara ¿tu? O quizás – el chico ha sacado un cuchillo y a apuñalado a Felix quien en ningún momento quito la mirada de los ojos de su amada – ¿el?

　　—Tu … como … puedes – los ojos de Marie se oscurecieron y perdió la cordura – imperdonable, imperdonable

　　La chica cegada por la ira y el odio comenzó a aproximarse a él joven cortando a cualquiera que se le acercara, claramente todo su juicio había desaparecido , entre más se aproximaba Ethan más temía y sus pasos en retirada se hacían más rápidos hasta que su espalda toco un árbol evitando que pudiera caminar más, cuando Marie con una sonrisa perturbaba estaba a punto de abanicar y matar a su enemigo fue golpeada por la espalda y esta cayo inconsciente en los brazos de Ethan quien con cuidado la levanto; aun temblaba de miedo pero por fin la tenía en sus brazos, su vestido blanco se había convertido en un desastre, manchado con la sangre de sus seres amados.

　　—Es hora de irnos – Ethan que era igual de atractivo a su hermano, pero un año mayor levanto a la chica y se subió a su caballo con ella – algún día lo entenderás Marie

　　—¿Mi señor que hacemos con los cadáveres?

　　—… divídelos lleva los de mis padres y hermano a la mansión los demás … — ha guardado silencio y sus ojos se han fijado en la chica que cargaba en sus brazos – a ellos también, les brindaremos un entierro vikingo como el que ellos realizarían

　　—Mi señor el cadáver de su hermano no esta

　　—¿Qué? – ha vuelto la mirada a la chica que reposaba en sus brazos – después lo encontraremos has lo que ordene.

　　—Si, mi señor

　　Los soldados han partido luego de poner en una carreta los cuerpos principales de la familia de ambos, los demás cadáveres han sido incinerados junto a la casa que habrían compartido los esposos, Marie inconsciente fue llevada por el nuevo duque a la habitación principal.

　　—Llama al médico de la ciudad y tráelo de prisa

　　—Si mi señor

　　Ethan sentado junto a la chica solo podía admirar la belleza de esta y lamentar lo sucedido, pero también era cierto que no se arrepentía, si tuviera que volver hacerlo lo haría sin dudarlo todo por aquella chica que más que amor le había generado una obsesión.

　　—¿Podrás amarme algún día? ¿O por lo menos me darás tu perdón? – susurro para si mismo ya que no era capaz de preguntar sinceramente –

　　Los ojos de Marie empezaron a titubear, trato de mover sus manos para refregar sus ojos y acomodarlos a la luz, pero le fue imposible, estaba atada a la cama como si fuera un animal.

　　—Por fin despiertas – la voz de Ethan resonó en la alcoba, el la observaba sin ninguna expresión mientras tomaba un sorbo de té –

　　—DONDE MIERDA ESTOY