-Por fin salí-exclamó Julián Bleir mientras tomaba una bocanada de aire fresco con fuerza.

Detrás de él estaba la prisión de ciudad López donde había estado encerrado los últimos tres años. Hoy fue el día en el que fue liberado.

--Hmmn, preguntó cómo es estarán mis padres.

Con una bolsa de lona rota en la espalda Julián se apresuró a casa de inmediato. Durante los últimos tres años sus padres nunca la visitaron, por lo tanto estaba preocupado por ellos.

De camino a casa Julián no dejaba de mirar el anillo color bronce que llevaba puesto.

Había un dragon realista tallado en el el, encima de la cabeza del dragon había un símbolo especial.

El anillo se lo dio Helmin un amigo de prisión, Helmin era un hombre extraño de manera constante divagaba de cómo era líder de la sexta del cielo y sabía todo incluida la astrología, la geografía, la medicina y mucho más.

No sólo eso, incluso afirmó que podia traer de vuelta a alguien de entre los muertos.

Todos trataron a Helmin como un loco y lo ignoraron en consecuencia. Solo Julián charlaba con el y compartía su comida de vez en cuando.

Helmin le contaba a Julián todo tipo de historias extrañas sobra la secta del cielo y la isla del cielo.

Estos eran nombres que Julián nunca había escuchado antes.

Ademas, Helmin hizo que Julián lo acompañara en su entrenamiento de meditacion y artes marciales.

Teniendo en cuenta lo aburrido que estába Julián en prisión con mucho gusto estubo de acuerdo.

Al cabo de tres años, Julián había aprendido una pletora de técnicas de artes marciales y habilidades médicas de Helmin.

En el fatico día de la liberación de Julián, Helmin le dio el anillo a Julián y le dijo que fuera a la isla innombrable en el Mar del Este el 15 de julio de ese año. Allí, se suponía que debía mostrar el anillo y alguien lo recogería. Cuando esto sucediera, a Julián se le otorgaría una maravillosa oportunidad.

Teniendo en cuenta lo mucho que había aprendido de Helmin, Julián, por naturaleza, tomó en serio sus palabras y prometió hacer lo que le dijiera, sin embargo aún quedaban algunos meses más antes de julio.

Antes de darse cuenta, Julián había llegado a la entrada de su casa. Cuando vio la casa en ruinas frente a él, sintió una sensación de amargura, ya que no sabía cómo se la arreglaron sus padres durante los tres años.

<<Debido a mis acciones precipitadas, mis padres deben haber sufrido mucho >>

Al recordar que había sucedido hace tres años, Julian se lleno de ira.

En ese entonces, el y su novia, kariela García, estaban en la etapa en la que hablaban de matrimonio. Eran compañeros de clase en la universidad y tenían una relación desde hace dos años.

Un día mientras acompañaba a kariela de regreso a casa se encontraron con Gerard Sabina, que estaba borracho.

Gerard era un niño rico en ciudad López, conocido por todas sus fechorías.

Cuando vio lo bonita que era kariela, albergó intenciones lascivas contra ella y comenzó a tocarla físicamente.

Cómo un niño rico famoso, Gerard ni siquiera se molesto en mirar a Julián.

En consecuencia, Julián se indigno y cuando vio que se aprovechaban de su novia, recogiendo un ladrillo del suelo, lo estrelló contra la cabeza de Gerard.

Uno no necesitaba ser un genio para adicionar el resultado.

Teniendo en cuenta lo poderoso que era Gerard, llamó a la policía, que arresto a Julián.

Por eso, Julián fue sentenciado a tres años de prisión por agresión.

Después de dudar por mucho tiempo, Julián llamó con suavidad a la puerta.

-¿Quién es? - Cuando se abrió la puerta, una anciana jorobada con un montón de blanco cabello asomo la cabeza. Extendiendo su mano como si quisiera sentir algo, preguntó-:¿Quién es? ¿Quién llama a la puerta?

Los ojos de la anciana están cerrados,. No podía ser más obvio que estába ciega.

Julián se quedó atónito en el momento en que la vio. Sus ojos se abriéron en estado de shock mientras todo su cuerpo temblaba ligeramente.

No podía creer que la anciana arrugada fuera su madre, Jazmín Tórres.

<<¿Cómo terminó mamá en ese estado en solo tres años? >>.

-Mamá, soy yo. ¡Julián!-Julián grito emocionado mientras daba un paso adelante para apoyarla.

-¿Julián? ¿Eres en verdad tu?

Mientras Jazmín usaba sus manos para sentir el rostro de Julián , las lágrimas no pudieron evitar rodar por sus mejillas.

-Mamá, soy yo. Soy yo en verdad yo. -

Las lágrimas también brotaron en los ojos de Julian-. Mamá, ¿Qué te pasó?

Julián estaba desconcertado de cómo su madre, que antes estaba sana, se volvió así después de solo tres cortos años.

-Um, es una larga historia. Entra primero antes de que hablemos, Jazmín empujó a Julian a la casa.

Al ver lo vacía que estaba su casa decrepita, Julian se sorprendió más allá de lo creíble.

Aunque no eran ricos, su padre tenía un trabajo estable. Por lo tanto, antes llevaban una vida sencilla pero cómoda.

-Mamá, ¿Qué pasó con nuestra casa?

-Julián cuestionó con horror.

Jazmín dejó escapar un suspiro

-Después de que te fuistes... Su madre le contó todo.

Después de que Julián fue enviado a prisión, la Familia González no pasó por alto el asunto. En cambio, exigieron un millón en compensación.

Sin otra opción, los padres de Julián vendieron la casa que compraron para su matrimonio y pidieron prestado mucho dinero. Incluso entonces, no fue suficiente.

Finalmente, tuvieron que pagar los últimos trescientos mil a plazos.

Así, el padre de Julián perdio su trabajo y solo puedo encontrar como barrendero. En cuanto a su madre, lloro día y noche hasta que se quedó ciega.

Esa fue tambien la razón por la cual sus padres nunca lo visitaron.

Mientras escuchaba a su madre, Julian apretó poco a poco el puño mientras sus ojos brillaban con intenciones asesinas.

No había esperado que la Familia Sabina no mostrará piedad a su familia.

-Mamá, ¿kariela no te ayudó en nada? Julián preguntó en un tono perplejo.

<<<kariela y yo estábamos a punto de casarnos. Además, fui encarcelado defendiendo su honor. Por lo tanto, no hay forma de que pueda quedarse de brazos cruzados y ver a mis padres terminar en este estado, ¿o si? >>.

Dejando escapar un suspiro Jazmín respondió:

-No menciones eso. La familia García no sólo nos ignoro, sino que ni siquiera devolvieron el regalo de compromiso cuando se lo pedí.

Afirmaron que no fue su culpa que la boda fracasará porque fuistes a prisión, por eso se negaron a devolverlo.

Cuando tu papá discutió con ellos, incluso lo golpearon por eso.

Cuánto más hablaba Jazmín al respecto, más se deprimida. Al final, sus lágrimas simplemente no paraban.