Era una tarde de otoño, el reloj marcaba las 18:00 horas, en una sala de hospital en un pueblo llamado Ciudad de Rosas, al sur de Chile. La familia Volkova se preparaba para tener a su primer bebé, luego de casi ocho horas en trabajo de parto nació una hermosa niña de piel blanca como la nieve, el cabello oscuro como la noche, con unos hermosos ojos grises, labios gruesos y rojos color escarlata sus padres la llamaron Elisa, el padre cargó a la bebé en sus brazos con decepción ya que esperaba tener un primogénito que continuara su legado, él y su esposa llevaban mucho tiempo tratando de ser padres y según los médicos este embarazo llegó a término solo de milagro, su esposa Lucía Hiriart es consciente de ello por lo tanto en más de una ocasión le sugirió a su esposo que buscara una concubina que pudiera darle el hijo que él tanto anhelaba, pero para Máximo Volkova es imposible tocar a otra mujer que no fuera su esposa, su amor hacia ella es más fuerte que cualquier tradición familiar, por su esposa él dejaría atrás todo con tal de ver felicidad en sus ojos.

-Es una niña muy bella tiene los ojos de mi madre- En el instante que la cargo, la pequeña bebé se aferró fuertemente al pulgar de su padre derritiendo toda frialdad en su corazón y este se derritió de amor ante su pequeño botón de nieve.

-No pude darte el varón que tanto querías, llevate a la niña no quiero verla. - Lucía se dirigió a la enfermera a cargo de la pequeña, pero Máximo se negó inmediatamente impidiendo que la enfermera se llevará a su hija.

- Mira Lucía, es hermosa y regordeta, tiene tus labios y el mismo color de tu cabello, no importa si no es un niño será amada por sus padres y criada con amor bajo las costumbres de nuestra familia- Lucía aún cansada después de estar varias horas en trabajo de parto, con lágrimas de felicidad rodando por sus mejillas se animó a cargar a su hija entre sus brazos, acomodarla en su pecho y alimentarla por primera vez mientras acariciaba delicadamente sus blancas mejillas.

Conforme pasaban los años la niña se volvía cada vez más hermosa, sus grandes y hermosos ojos grises podían reflejar la pureza que habitaba en su alma, desde pequeña siempre creció rodeada de amor y buena fortuna, su abuela Esmeralda Smirnova

madre de Máximo

la ama muchísimo, no solo por ser su única nieta si no también por el gran parecido en ambas, ella y las sirvientas de la casa aman y cuidan a la hermosa niña ya que sus padres deben estar al frente de las empresas y los viajes fuera de Chile que eso conlleva lo que les llevó a perderse algunos momentos importantes de su niñez, eso no quería decir que no la amaran, pero muchas veces los padres creen que la tenencia económica es más importante para que así a su hija no le faltara nada en el futuro, la familia Volkova siempre está en las primeras páginas de la revista Forbes como una de las familias más poderosas e influyentes a nivel mundial.

Así fueron pasando los años ahora la bella niña ya tenía 15 años, se convirtió en una joven muy hermosa dotada talento para tocar el piano y el arpa, tanto así que Iñigo De la Plaza un apuesto hombre de veinte años,metro ochenta y cinco, de figura atlética, ojos verdes y piel bronceada, hijo mayor de una de las familias más influyentes de la zona está perdidamente enamorado de ella pues cuando eran niños sus padres acordaron que se casaran al cumplir Elisa su mayoría de edad, pero ella solo lo ve como un buen amigo, su corazón pertenece a un apuesto hombre que aparece en sus sueños cada noche desde que cumplió catorce año. Esta noche mientras dormía despertó asustada por el terror que le generó una pesadilla en donde se veía a ella misma como caía por un acantilado vestida de un antiguo vestido de novia, de sobresaltó abrió los ojos y vio a un hombre vestido con un hermoso traje negro parado a los pies de su cama, apenas lo vio la figura de aquel hombre se apresuró a encender la linterna de su móvil, pero su sorpresa fue enorme al notar que aquella figura que la observaba desde la oscuridad se esfumó ante sus ojos, aturdida por lo que acababa de ver se levantó y encendió la luz de su cuarto, pero no había nadie más que ella allí, asustada corrió despavorida hacia la habitación contigua donde duerme su abuela.

- ¡Abuela! - grito despertando a todos en la gran mansión, sus padres y la ama de llaves corrieron a la habitación preocupados de que algo malo le sucediera, al entrar la vieron aterrada, llorando sentada sobre la cama acurrucada en los brazos de su querida abuela Esmeralda.

- ¿Qué sucedió? - Preguntó Máximo abrazando a su hija después de mucho tiempo sin hacerlo.

-Había un hombre en mi habitación papá, pero cuando encendí la luz ya no estaba. - Máximo acunó a su hija entre sus brazos mientras da la orden de revisar todo el lugar, ningún hombre podía meterse a la habitación de su hija mientras dormía y librarse de él, los encargados de la seguridad buscaron por todos los rincones, pero no había nadie, revisaron las cámaras de seguridad pero no había señales de que alguien hubiera entrado o salido de la casa, después de la extensa búsqueda los guardias dieron aviso de que no había nadie dentro de la residencia ni por los alrededores de esta .

- No hay nadie, puedes volver a dormir tranquila gatita, mañana es tu cumpleaños será un día especial - Lucía beso la frente de su hija y la cobijo hasta que se durmió, mientras recordaba la primera vez que la cargó en sus brazos, ante sus ojos seguía siendo su pequeño botón de nieve, amaneció y como de costumbre Elisa se ducho, desayuno rápido y se preparó para ir a clases, donde la esperan sus únicas amigas Alejandra y Andrea, las tres han sido inseparables desde que se conocieron a la edad de tres años ya que sus madres también son buenas amigas y visitaban juntas la cafetería flor de loto ubicada en el corazón de la ciudad.

-Elisa por suerte llegaste temprano hoy

-¡Feliz cumpleaños! - Gritaban eufóricas sus queridas e inseparables amigas, ambas extendieron sus brazos para entregar un pequeño presente a su amiga en un día tan especial para ella .

-Gracias las amo niñas – Elisa emocionada abrió los regalos que le dieron sus amigas, Alejandra le regaló una pulsera de plata y Andrea un par de aros que combinan perfectamente con la pulsera que Alejandra le había regalado, mientras se abrochaba la pulsera y colocaba los aretes sonó el timbre de escuela anunciando el ingreso a clases, Elisa tuvo que contenerse hasta el recreo para contarles a sus amigas lo que le sucedió la noche anterior.

-¿Chicas se acuerdan del hombre misterioso que aparece cada noche en mis sueños? - Ambas asintieron atentas a lo que diría Elisa, pues ambas estaban con la intriga de saber qué significaban esos sueños ¿Podrían ser recuerdos de alguna vida pasada o quizá indicios de un futuro cercano? .

-Anoche tuve una pesadilla y al despertar él estaba ahí parado frente a mi cama observando mientras dormía, pero apenas encendí la luz se desvaneció. - Las jóvenes abrieron los ojos como platos llenas de asombro y curiosidad.

-Debe ser algún indicio del destino amiga así como yo conocí a Daehyun– Alejandra suspiraba enamorada al recordar a su amado Daehyun, un guapo joven surcoreano, un par de años mayor que ella con quien planea casarse apenas cumpla su mayoría de edad.

-Cambiando de tema tus padres invitaron a los nuestros a tu fiesta de cumpleaños esta noche.

-Mis padres se están comportando de manera muy cariñosa últimamente, supongo que debo esperar hasta esta noche para saber a qué se debe este cambio- Las horas pasaron rápidamente en este día tan especial, cuando llegó la hora de volver a casa las tres amigas se despidieron rápidamente para prepararse para el gran evento de esta noche, están invitados todos los amigos de la joven y los amigos más influyentes de Máximo con sus respectivas familias, en otras palabras casi toda la alta sociedad de Ciudad de Rosas estaría hoy en el cumpleaños número 16 de Elisa Volkova.

Elisa debía prepararse pero no sabia que ponerse, ya era casi la hora de empezar la fiesta cuando entró su madre luciendo su hermosa figura, llevaba un vestido estilo sirena color rojo burdeo, que resaltaba su enorme belleza la cual Elisa heredó, en sus brazos llevaba un hermoso vestido verde esmeralda intenso recién traído de la casa de modas de la cual ella es dueña.

-Mandé a confeccionar este vestido exclusivamente para ti, yo misma lo diseñe. - Los ojos de Elisa brillaron de emoción al ver el hermoso vestido, pero más aún por el gran detalle que su madre había tenido con ella, sus ojos se inundaron de lágrimas pero su madre las secó de inmediato.

-No llores gatita o arruinaras tu maquillaje por cierto feliz cumpleaños hija, tu padre te envía esto es una gargantilla que era de su abuela, es tu primera herencia familiar, es de esmeraldas, combinan perfectamente con el vestido, no tardes los invitados ya están preguntando por ti. - Después de decir eso Lucía bajó a saludar a los invitados dejando emocionada a su hija, entre ellos a unos invitados muy peculiares, la Familia De la Plaza.

Elisa se puso el vestido y la gargantilla que su madre le dio, no podía dejar de verse en el espejo luce como un miembro de la realeza, el vestido acentuaba su exuberante figura, pero sus ojos reflejaban su inocencia, dejó suelta su enorme cabellera negra color azabache que cae por sus hombros como cascadas, nerviosa retoca el brillo de sus labios viendose al espejo por última vez teniendo un extraño presentimiento, se llenó de valor y bajo decidida a la fiesta luciendo fabulosa, llegó al final de las escaleras y los focos de las cámaras se posicionaron sobre ella, su padre subió a su encuentro, beso a su hija en la mejilla y juntos bajaron tomados del brazo, los invitados aplaudían y comentaban lo particularmente hermosa que se ve la única hija y heredera de la familia Volkova. Después de varios minutos de saludar a los invitados y socios de su padre, Alejandra, Andrea y Daehyun se acercaron a saludar y a rescatar a la joven.

-Gracias por sacarme de ahí, me estaban asfixiando.- Pasaron un rato bailando, riendo y disfrutando de la velada hasta que Andrea divisó a Iñigo acercándose donde ellos.

-Pss Elisa ahí viene el adonis de Iñigo de la plaza, creo que esta enamorado de ti, no te ha quitado los ojos de encima desde que bajaste a la fiesta. - Daehyun tiene varios negocios la mayoría no son nada legales, su instinto agudo le avisa que algo malo pasará esta noche y que esto involucra directamente a Iñigo De la Plaza.

-Elisa te ves despampanante esta noche .- Iñigo tomo a Elisa por la cintura haciéndola voltear besando la mejilla de la menor cerca de la comisura de sus labios.

-Tu padre te busca dirá unas palabras a la prensa y necesita que estemos a su lado.- Elisa extrañada por lo que acaba de decir Iñigo le pidió a sus amigos que la acompañen, estos asintieron y fueron con ellos para escuchar lo que diría el padre de Elisa.

-Padre ya estamos aquí.- Los reflectores se posicionaron sobre Máximo, Iñigo y Elisa que acababan de llegar.

-Queridos amigas y amigos, como todos ya saben hoy mi hermosa hija aquí presente cumplió dieciséis años, cuando cumplio cinco años la familia De la Plaza pidió la mano de mi hija en matrimonio para cuando tenga la edad suficiente se case con Iñigo.-Al escuchar las palabras salidas de la boca de su propio padre, las lágrimas no tardaron en rodar por las pálidas mejillas de Elisa que jamás estuvo enterada de esta negociación, se sintió tratada como cuál ganado, vendida a un hombre al cual no desea, por su puesto su rebelde corazón no cederá ante tal injusticia .

-¡No! No me comprometeré con el papá, no puedes obligarme. - La joven se zafo del agarre de Iñigo y enfrentó a su padre por primera vez en la vida, la cara de Máximo ardía en cólera ante tal osadía, pues estaba quedando en ridículo frente a todos los invitados y la prensa que no paraba de tomar fotografías y grabar tal espectáculo.

-Mientras vivas bajo mi techo harás lo que te diga. - Máximo alzó la voz gritandole por vez primera a su única hija, la prensa disfrutaba de todo el espectáculo, ante semejante bochorno Lucía tuvo que intervenir para calmar a su esposo.

-¡Es suficiente Máximo! Elisa ve a tu habitación de inmediato, por mientras tu padre y yo arreglaremos el escándalo que formaste.- Elisa subió llorando las escaleras, su abuela que había visto todo lo sucedido subió tras ella para consolarla, cuando la joven abrió la puerta de su habitación vio una mochila y una carta sobre la cama, con los ojos llorosos tomó la carta y comenzó a leer:

"Mi pequeña gatita de ojos grises.

Si estás leyendo esta carta es porque tu padre anunció tú compromiso con Iñigo De la Plaza, me avergüenza no interponerme cuando decidió comprometerte, pensé que se olvidaría con el pasar de los años, pero hace unos días Iñigo le habló sobre sus intenciones de casarse contigo, no permitiré que tu padre convierta tu vida en un infierno, dentro de la mochila encontrarás el suficiente dinero para que vivas bien por mucho tiempo, con tu abuela y la ama de llaves tenemos un plan para que huyas en medio de la fiesta sin que nadie lo note, espero verte pronto mi querida y dulce niña.

Se despide con amor mamá".

-Tienes que irte querida, toma estas llaves, es de un departamento que compre en el centro de la ciudad, ahora es tuyo, ten cuidado y no la pierdas, de todos modos ya arregle todo para que seas bienvenida y no tengas inconvenientes

-Gracias abue.- Elisa se puso jeans, una camiseta blanca, converse celestes y una chaqueta verde oliva, sin mirar atrás se escabulló entre los invitados y corrió mientras las lágrimas salían de sus hermosos ojos grises, después de diez minutos se detuvo en una parada para hacer parar un taxi, estaba tan triste que no noto el auto negro que se detuvo frente a ella, desde el interior un hombre la observa detenidamente, sus profundos ojos celestes brillaban intensamente llenos de lujuria observando a detalle la exuberante figura de Elisa, despertando en él un intenso deseo por poseerla, pues la hermosa joven aparece en sus sueños cada noche desde ya hace unos años, al notar que apenas era una niña sintió vergüenza por la enorme erección que se levantó bajó su pantalón con tan solo verla, dio un largo suspiro mientras la observa, sabiendo que es menor de edad le hizo una seña al chófer para que siga su camino.

Pasaron rápidamente los siguientes dos años ahora la hermosa joven ha crecido, tiene 18 años ha alcanzado su mayoría de edad. Su larga cabellera ondulada color azabache la hace ver encantadora, después de huir de su casa encontró trabajo como mesera en una cafetería donde solía ir con su abuela y con su madre cuando era pequeña, con mucho esfuerzo terminó sus estudios, ahora se prepara para ir a la universidad, con el pasar de los años se fue ganando el cariño y confianza de su jefe, la ascendió como administradora y le aumentó el sueldo,Por su parte el señor Alonso dueño de la cafetería es muy bueno con ella, la quiere como a la hija que no pudo tener ya que su esposa murió a muy temprana edad y él no volvió a casarse.

Eran las 21:00 horas en una calurosa tarde de marzo antes de la llegada del otoño, Elisa seguía trabajando, estaba muy cansada y soñolienta, así que cerro el café y se dirigió a su departamento, de camino a casa iba distraída por los mensajes de sus amigas Andrea y Alejandra, sin notar que de frente viene un hombre herido que pedía ayuda hasta que chocó con ella