About
Table of Contents
Comments

  ..."Nunca debiste haber confiado en mí amabilidad... ¿que no lo entiendes? Soy un hombre buscado, tengo sangre en mis manos”.

  _ _ _ _ _ __ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ __ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ __ _ _ _ _ _ _ _

  Oh cariño... ¿tu aquí otra vez? ¿No ha sido suficiente para ti? porque yo no he tenido suficiente de ti, no sabes cómo me gusta jugar con tu mente y esperar a que caigas para darte cuenta de que no debiste haber confiado en mí, ¿quieres conocerme? porque yo tengo mucho que enseñarte... ¿piensas que me he olvidado de ella? No. claro que no le he hecho ¿crees que la dejare libre? puede que lo haga, pero quiero sorprenderte, quiero que aprendas conmigo porque los demonios tienen rostro de ángel, quiero que aprendas conmigo que no debes confiar en los humanos, no importa cuánto les entregues ellos siempre encontraran la manera de dañarte, ¿debo repetirte mis reglas?

  La primera y las más importante, no confíes en mi preciosa, cuando lo hagas, entonces serás mía, te lo he advertido. Segundo, deja tus prejuicios fuera, no intentes entenderme, porque no lo harás y la última pero no menos importante, no te enamores, porque una vez lo hagas las dos primeras reglas serán quebrantadas y tu habrás conocido lo que tanto quisiste evitar

  ¿Quieres empezar ya? siento ansiedad, ¿tengo que ir hasta donde estas o crees que llegaras a mi sin necesidad de acercarme a ti?, cariño, te lo he advertido...no esperes de mi lo que sabes que no te daré, no me mires con lástima que lastimarte será lo primero que haré ¿lo has entendido?, entonces estas listas para comenzar.

  ***

  Uno, dos. tres vasos de wiski, el cuarto trago quema en mi garganta, mi labio sangra, ¿me metí en alguna pelea otra vez? Mi cabeza duele como el infierno. Un golpe en la puerta me hace levantarme del sofá en el que estaba sentado, ¿alguien se ha acordado de mí?

  Me encamino a la puerta, han dejado de tocar, es ella otra vez, ¿que hace aquí otra vez? creí haberle dicho que no quería a nadie en mi casa.

  — ¿Podemos hablar? No puedes estar aquí solo. — la mire con desprecio, su ropa cara, su perfume, todo en ella me molestaba, no necesitaba la caridad de nadie.

  —Vamos chico. te he traído algo de comida. — la mujer me miraba con lastima, odiaba eso.

  Entro a mi casa dejando un par de bolsas sobre la mesa, ¿porque todos se sentían con el derecho de creer como me sentía?, se sentó en una de las viejas sillas esperando a que le dijera una palabra, una sola, ¿qué le hacía pensar que hablaría con ella?

  —No puedo dejarte aquí solo Kian, tienes que venir conmigo, el servicio nacional de menores te dará un nuevo hogar, ¿lo entiendes?

  ¿Por qué me trata como idiota?, tengo 16 años, se perfectamente cómo funciona el sistema, y sé que allá nadie cuidara de mí, solo seré uno más, no me gustan las personas, no quiero a nadie cerca, prefiero estar solo ¿por qué no lo puede entender?

  Me aleje de ella mirándola con odio, si no se iba juro que la mataría.

  — ¿Por qué no hablas conmigo? por favor. habla conmigo Kian, todo va a estar bien. — intento acercarse a mí para tocar mi mano, no quería que me tocara.

  —Kian. tienes que hablar con alguien sobre lo que sucedió... no te quedes con eso dentro, solo va a lastimarte, no puedes estar ebrio todo el día, tienes solo dieciséis años, hay mucho mas allá afuera. Conocerás a niños que han pasado por lo mismo que tú.

  ¿lo mismo que yo? odio cuando las personas asumen que todos sentimos igual, no es cierto, ella no sabía nada, no tenía idea, de seguro llegaba a casa y tenía alguien esperándola, tenía gente que la amaba, yo no tenía a nadie, nadie.

  Se levantó de la silla mirándome derrotada, sabía lo que iba a pasar, y no importa cuánto luche era inevitable.

  —Lo siento mucho Kian. debo llevarte — de pronto la puerta de entrada se abrió dejando ver a dos hombres, ¿por qué no puedo quedarme? ¡Esta es mi casa! ellos son los extraños en ella.

  Los tipos tomaron mi brazo para sacarme de la casa, la mujer parecía afectada ¿porque lloraba por mi si no me conocía. Conocía lo que decían de mí, no mi historia, no lo vacío y roto que me sentía.

  ¡Intente apartar sus manos, pero no me soltaron— Suéltame! no me toques! — sus manos estaban lastimando mis brazos, ¿por qué no puede el mundo dejarme en paz? Me subieron a uno de sus autos lujos, miré por la ventana como la casa donde crecí quedaba atrás junto a todos mis recuerdos.

  —Estarás bien Kian te lo prometo, harás nuevos amigos, gente como tú — ¿gente como yo? ¿soy diferente? ¿es que acaso no soy normal? No. no lo eres, eres un monstro que nadie nunca va a querer.

  La casa a la que me llevaron era enorme, ella tenía razón, había muchos chicos, pero ninguno como yo, miraban mi ropa sucia y haraposa con desagrado ¿su ropa limpia los hacia mejor persona?

  — Su nombre es Kian. — la perfumada señora se apartó de mi para comenzar a contarle mi "historia" a la chica en la recepción — sí. es el chico del que te hable, tiene una historia muy triste— se apartó mirándome con lastima— su madre fue violada frente a sus ojos, la encontraron muerta, él estuvo solo todo ese tiempo... del padre no se sabe nada, he hablado con una de sus tías, pero no quiere hacerse cargo de el — la chica me miro sorprendida— no podía dejarlo en esa casa solo, no tenía nada de comida. ya ha comenzado a beber, solo tiene dieciséis años por el amor de dios. —

  — puede quedarse en la habitación con Max— la señora la miro preocupada.

  —No habla mucho. y Max no es muy buena influencia para el ahora— la chica tomo su mano disculpándose— lo siento mucho. ya no hay más habitaciones disponibles.

  —Está bien. no te preocupes. — se acercó a mí para mirarme con una sonrisa— vamos cielo. te llevare a tu habitación.

  —No me llame cielo — la tome de su horrible chaqueta, me miro asustada, pidiéndome que me tranquilizara—

  —Está bien Kian. Kian por favor suéltame, me estas lastimando — sonreí satisfecho.

  "lastimar" causar un efecto en otra persona...suplicar, las suplicas no sirven, por más que le suplique al idiota que soltara a mi madre no lo hizo. es culpa de ella, nunca fue madre, solo se dedicó a ser una suelta. La ira comenzó a llenar mi pecho, sentir, quería sentir, quería volver a sentirme vivo, ¿por qué me sentía tan muerto? ¿tan vacío por dentro? quería que todos entendieran lo fácil que era ser destruido, y esta estúpida, iba ser mi primera víctima.

You may also like

Download APP for Free Reading

novelcat google down novelcat ios down